31 Oct ¿Sabemos utilizar las luces del coche correctamente?
Con la llegada del otoño, los días se hacen más cortos, la oscuridad llega antes y por lo tanto, hacer un buen uso de las luces de nuestros coches es cada vez más importante. De hecho, hace pocos días que retrasamos nuestros relojes para llevar a cabo el cambio horario, permitiéndonos una hora más de sueño pero un anochecer más temprano también. Todo con el objetivo de lograr un ahorro energético, aprovechar la luz natural y como demuestran varios estudios, obtener beneficios en la seguridad vial, las condiciones de trabajo, la salud, el turismo y el ocio.
Sin embargo, hay muchas críticas que cuestionan esta normativa de la Unión Europea y que se posicionan en contra de los cambios de horarios. Muchos aseguran que, aunque pueda aportar puntos positivos, también aporta riesgos a los conductores ya que al reducir las horas diurnas y acelerar los anocheceres muchos quedan expuestos a conducir en la oscuridad. Sobre todo, todos aquellos que se desplazan a sus puestos de trabajo y deben volver a casa al finalizar su jornada laboral. Por esta razón es básico que sepamos utilizar bien los faros de nuestro coche.
Información de la iluminación de los coches
Luces cortas
Un vehículo dispone de las luces de cruce, también conocidas como luces cortas. Éstas deben encenderse mientras circulamos de noche en prácticamente todas las vías, por los túneles etc… Del mismo modo, se tienen que emplear si se circula por un carril de doble sentido o durante el día, cuando tenemos problemas de visibilidad.
Luces de carretera
Las luces de carretera o largas, se utilizan exclusivamente de noche y cuando se carezca de iluminación en la vía por la que circulamos. Según la normativa, deberían utilizarse cuando el conductor sea incapaz de leer una matricula a 10 metros de distancia o no consiga distinguir el color de un vehículo a 50 metros. Está estrictamente prohibido su uso en zonas urbanas, ni autovías y autopistas cuando vengan otros vehículos de frente. Debemos ser conscientes del riesgo que existe de deslumbrar a otro conductor, sea de frente o por el retrovisor.
Las luces antiniebla
Se tratan de una iluminación de uso muy puntual ya que su función consiste en alumbrar en condiciones meteorológicas adversas como una lluvia muy intensa, nieve, humo o niebla, en las cuales hay muy poca visibilidad. En caso de que la situación sea menos extrema, utilizar estas luces sería hacer un mal uso de dicha iluminación ya que podríamos provocar deslumbramientos a otros conductores.
Luces de posición
Las luces de posición, como su nombre indica, simplemente indican la posición y la anchura del vehículo. Es un alumbrado que siempre va acompañado por las luces cortas, largas o antiniebla. Si vas a dejar tu coche en un lugar en el que debe ser visto como un arcén o la misma calzada, debes encender las luces de posición para que el resto de vehículos vean las dimensiones.
Luces de marcha atrás
Esta iluminación se enciende inmediatamente cuando el conductor decide realizar la marcha atrás. Son muy útiles para indicar al resto de conductores que vas a desplazarte hacia atrás y estos, estén advertidos y puedan prevenir tus movimientos.
Luz interior
La luz interior se encarga de iluminar el habitáculo del vehículo. Es crucial conocer los momentos puntuales en los que se puede utilizar ya que puede resultar peligrosa para el propio conductor del coche. Se recomienda que se utilice de forma puntual y el tiempo necesario para centrar nuestra atención en la carretera.
En definitiva, ¿sabíais que el 90% de la información que necesitamos para conducir, la recibimos por la vista? Si no tenemos suficiente iluminación para ver la carretera correctamente, pueden haber consecuencias terribles. Las luces son un elemento crucial de cada vehículo ya que se tratan de indicadores viales que permiten una conducción más segura. Debemos pues ocuparnos de su mantenimiento y correcto uso porque de lo contrario podríamos acabar heridos o sancionados.
Fuente: La Vanguardia
José
Publicado en 11:59h, 15 noviembreFalta describir las luces de día.